INDUSTRIAS MAYKA S.A.. Rif: J-00046369-7
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ALMOHADILLA N. 0
Mayka nace un día indeterminado de 1958, cuando su fundador, Joaquín Barrobés salió a la calle en busca de insumos de papelería para su trabajo y comprobó, con asombro, que prácticamente todo lo que se consumía en el país era importado y se vendía a precios que le parecieron desproporcionados. Preguntó, indagó, realizó una muy rudimentaria y reducida encuesta y decidió fabricar el primer “Archivador tipo Sinfonía”. En su casa, fuera del horario de su trabajo y con herramientas rudimentarias y escasas, consumió gran cantidad de material hasta que dio por terminado el primer ejemplar que llevó en calidad de muestra a una de aquellas papelerías donde le informaron del elevado precio y del origen extranjero de aquel producto. Hizo su oferta y recibió su primer pedido.
Joaquín Barrobés renunció a su empleo formal y estable, y asumió personalmente todas las funciones de su incipiente negocio: Obrero, mecánico, capataz, administrador, vendedor, chofer, repartidor, cobrador y secretario, con ayuda de su esposa, Doña María (Simplemente María). Lo que fue una microempresa, cuyo primer taller funcionó en una precaria construcción ubicada en Quinta Crespo (Caracas), empezó a crecer en volúmenes de producción, en diversidad de productos y en número de clientes. De modo que, en menos de dos años, traspasó los límites de Caracas y empezó a surtir clientes de las principales ciudades del interior del país. Todo ello, con un gran esfuerzo personal que implicó, durante años, jornadas de 16 horas durante los siete días de la semana. Muy poco después de los primeros archivadores tipo sinfonía y con la incorporación de personal, empezaron a fabricarse carpetas colgantes, carpetas de fibra, archivadores con mecanismo de palanca y ganchos para carpetas. Para entonces, uno de los principales objetivos de Mayka era la sustitución de importaciones y un crecimiento que le permitiera abastecer más y mejor al mercado venezolano, lo cual siempre se antepuso a cualquier perspectiva de exportación.
Desde 1958, hasta 1961, la empresa opera en un local comercial ubicado en Los Chaguaramos (Caracas), donde funcionó como taller y papelería abierta al público. Desde 1961 hasta 1963, taller y papelería funcionaron en los locales 5 y 7 del Edificio Amengual, ubicado en la Esquina de Puente Hierro (Caracas). Hasta que en 1963 se traslada el taller a un local más apropiado, ubicado en la Carretera de El Junquito, cerca de Caracas y se mantienen papelería y oficinas en Puente Hierro, para constituir la primera Distribuidora del Grupo. Este paso representó un salto cuantitativo importante en la capacidad de producción y servicio de Mayka, que para entonces añade a su oferta bandas de goma y almohadillas para sellos de caucho. El intenso ritmo de trabajo de Joaquín Barrobés no cesaba.
La fábrica crecía y para 1966, distribuía personalmente los productos de Mayka en Caracas y en los Estados Miranda, Anzoátegui, Sucre, Monagas, Bolívar, Aragua, Carabobo, Lara, Zulia, Falcón, Cojedes, Portuguesa, Trujillo, Mérida y Barinas. La Empresa inicia su vocación familiar cuando en 1964 y hasta 1967, cuenta con la valiosa colaboración de Francisco, Ana María y Montserrat Barrobés. Para esos momentos, Mayka estaba en franco crecimiento y requería la integración de un equipo ejecutivo, que se logró en 1969 con la incorporación de Daniel Barrobés (hermano de Joaquín) y de Manuela Feo de Barrobés. Entre 1969 y 1977, Mayka experimenta una evolución importante. Agrega a su oferta las carpetas de manila, manufacturas de vinilo electro-confeccionado como las carpetas de argollas, productos de plástico inyectado como reglas y juegos geométricos, sacagrapas, artículos de fabricación metalmecánica como mecanismos de archivo y encuadernación, y uno de sus productos más importantes y emblemáticos, los borradores Nata, ampliamente conocidos. planta, servicios, viviendas y demás instalaciones que componen el Complejo, cuya primera etapa se inaugura en Enero de 1978.
En esta etapa, se inicia la instalación progresiva de empresas filiales. Puerto La Cruz (1974), Maracaibo (1975), Maracay (1976), Barquisimeto (1977), San Cristóbal (1978), y Ciudad Bolívar (1989), que junto a la primera distribuidora que ya funcionaba en Caracas (1963), constituyen actualmente una de las organizaciones de distribución mejor estructuradas del ramo y que significó un aumento importante en las ventas, al punto que se vio sobrepasada la capacidad de la fábrica que funcionaba en El Junquito. Se entendió la necesidad de su traslado y reinstalación en una ubicación más adecuada. En 1975, se adquieren los terrenos que hoy ocupa el Complejo Mayka, en Nirgua, Estado Yaracuy. Con escaso apoyo financiero externo, se acomete la construcción de la planta, servicios, viviendas y demás instalaciones que componen el Complejo, cuya primera etapa se inaugura en Enero de 1978.
Desde entonces, Mayka prosigue tras su objetivo de sustituir importaciones y abastecer más y mejor el país. En 1989, se inicia la fabricación de papel crepé. En 1990, la fabricación de lápices plásticos de colores y en 1991, aprovechando la capacidad de distribución del Grupo, se inicia la importación de artículos afines, la mayoría de los cuales no se producen en Venezuela, de los que cabe destacar, la línea de pegamentos y adhesivos alemanes de la marca UHU. Asimismo, se han realizado importantes inversiones en el mejoramiento de procesos productivos, administrativos y de comercialización. Hoy, la Dirección apuesta por la consolidación, crecimiento y mejoramiento en todos los aspectos del funcionamiento y operaciones del Grupo. Al celebrar con orgullo y satisfacción sus primeros 50 años de vida, reconoce y agradece a todos aquellos trabajadores y colaboradores que han aportado su valioso esfuerzo para que Mayka haya sido posible. De igual manera, reitera su compromiso de apoyar a las instituciones del Municipio Nirgua, en función de su política de Responsabilidad Social, especialmente a las unidades educativas que atienden a la población estudiantil de bajos recursos. INDUSTRIAS MAYKA, S.A. junto a las empresas afiliadas que forman el Grupo, está dedicada a la fabricación y distribución de artículos para oficina y material escolar en Venezuela.
Fue fundada en 1958, y a lo largo de su trayectoria, de casi medio siglo, se ha constituido en una suministradora, segura y fiable, en el ramo, por el amplio surtido de su oferta y por su constante empeño en ofrecer la mejor relación calidad-precio posible. La filosofía inicial de la Empresa se fundamentó en el desarrollo de un amplio programa de fabricación, que incluyó productos diversos procedentes de la metalmecánica (Ganchos para carpetas, mecanismos para la encuadernación, sacagrapas, entre otros); del cartonaje (Sinfonías, archivadores, carpetas colgantes, carpetas de fibra y más); del plástico inyectado o termo-sellado (Juegos de geometría, bandejas, carpetas de argollas, por mencionar sólo algunos); del caucho (Bandas de goma); de los plastisoles (borradores) y del papel (papel crepé). Esta extensa oferta permitió el establecimiento de una eficaz red de distribución propia, con siete depósitos ubicados en los centros de mayor consumo del país, garantizando de esta forma un servicio rápido y constante a todos los puntos de venta del sector.
En la actualidad, esta red de ventas, sin duda la mejor estructurada dentro de nuestro mercado, nos ha permitido complementar nuestra oferta de productos de fabricación propia, con una selección de artículos importados de calidad y precios cónsonos con los requerimientos del consumidor final. Asimismo, estamos proyectando una política de ampliación de la oferta a los países de nuestra área de influencia. Por todo ello, podemos afirmar que nuestra organización ofrece un completo servicio al mercado papelero y es una empresa líder en el mismo.
Somos una empresa dedicada a la manufactura, conversión y comercialización de productos escolares y de oficina para el mercado nacional e internacional, orientada a satisfacer las necesidades reales de nuestros clientes, en cuanto a calidad, servicio y diversidad. Para ello mantenemos una empresa estable, que garantiza la presencia de sus productos, una excelente relación precio-valor y la satisfacción de expectativas de todos los que la integran.
Industrias Mayka, S.A. establece como Política de Responsabilidad Social, cumplir con todos los aspectos laborales (Legales y reglamentarios) establecidos por las leyes venezolanas, relacionadas con la salud, la seguridad, el ambiente, la contratación y las prácticas de trabajo. Estamos comprometidos con la sociedad, por lo cual, apoyamos a Instituciones Educativas o sin fines de lucro, dedicadas a formar o mejorar la calidad de vida en los sectores más necesitados de nuestro estado.
Joaquín Barrobés Cortiella nace el 25 de Julio de 1931 en Barcelona (España), en los tiempos difíciles y convulsos de una República de vida corta. Hijo de Rosario y José, trabajadores humildes, descendientes de campesinos y pastores, venidos a la ciudad en busca de futuro, desde Bot y Horta de Sant Joan. Estos pequeños pueblos de la provincia de Tarragona (España), ubicados en una comarca de pequeños valles y montañas pedregosas, de terrenos ásperos y clima seco, de agua escasa y gente laboriosa, rústicos, pobres y austeras, de viñedos, olivares, pastoreo de ovejas y cabras, cuyo sello llevará Joaquín toda su vida.
La Guerra Civil y la posguerra, que por su violencia, dramatismo y barbaridad marcarán a todos los españoles de varias generaciones, tuvieron asimismo un efecto fuerte y determinante en la familia Barrobés, particularmente en Joaquín, que pasa de la infancia a la adolescencia, siendo testigo de la violencia, de los miedos, de la escasez, de la vida en refugios y de acontecimientos que separaron a la familia. El padre permanece trabajando en la Barcelona castigada y bombardeada, mientras Rosario se refugia en Horta de Sant Joan, con sus niños José y Joaquín, huyendo de de la violencia. Sin embargo, les alcanzó cuando la guerra se traslada al frente del Ebro, cerca de Horta de Sant Joan. Esta situación les fuerza a procurar refugio en las montañas de la comarca. José, apenas mayor que Joaquín, es herido por un artefacto de guerra abandonado (1939), en un desafortunado accidente que obliga a Rosario a llevarlo Barcelona. Este hecho, por las circunstancias de la posguerra, se convierte en una experiencia que forjará a Joaquín, ya fuerte y voluntarioso de por sí.
Permanece desde los 9 a los 11 años, prácticamente sólo y aislado en las montañas, a cargo de un rebaño de cabras y su único contacto con el mundo exterior es la vista de una carretera muy a lo lejos de los solitarios y agrestes lugares donde transcurre esta etapa. Pasa semanas enteras sin contacto alguno con otras personas, dependiendo de sí mismo. Esto consolida el carácter y personalidad de un sobreviviente, con la fuerza, determinación y seguridad excepcionales que caracterizaron a Joaquín. A los 11 años, Rosario le encuentra y le lleva al hogar de la familia, en Barcelona, donde poco después nacerá Daniel, el hermano menor.
Desde entonces, tras un fugaz paso por una escuela a la que no se adapta por las obvias diferencias entre los niños de ciudad y el adolescente, que ha sobrevivido a la soledad y el ostracismo en las montañas, se dedica al trabajo tenaz y casi sin descanso durante 60 años. Desde 1945 hasta 1956, excepto el período de servicio militar que cumple en Marruecos, su trabajo se centra en la industria de los alimentos: Procesamiento de lácteos, confitería, repostería industrial y conserva de vegetales. Llegando a desempeñar labores de supervisor y coordinador de producción en fábricas ubicadas en Barcelona y en Lérida, desde los 19 hasta los 25 años, momento en que emigra a Venezuela buscando futuro, como lo hicieron sus padres, del campo a la ciudad. En 1954, se casa con María Victoria Martínez, nacida en Barcelona, quien le acompaña y ayuda toda su vida con entrañable integridad, amor y lealtad. Le da cuatro hijos. En 1956, emigra a Venezuela tras una falsa oferta de trabajo en una industria alimenticia. Se encuentra en un país extraño, con esposa e hijo pequeño y sin trabajo. Busca y encuentra empleo en una empresa de procesamiento y distribución de alimentos, regentada por unos coterráneos.
Se entrega nuevamente al trabajo con ilusión y pasión hasta que, en 1958, descubre la oportunidad de hacer cosas que no se hacían en Venezuela. Desde entonces, la historia de Joaquín es la historia de Mayka, hasta que, en 1987, con la empresa consolidada, decide iniciar un proceso paulatino de sucesión, para delegar la dirección en una nueva generación integrada por su hermano Daniel y sus hijos. Esta circunstancia permite a Joaquín tomar la distancia necesaria para que el nuevo equipo actúe y demuestre la capacidad de sucederle, hasta que en 1998 se retira para aislarse y dedicarse, con pasión, al cuidado de unos olivos en la tierra de sus antepasados, en la agreste y rústica comarca de “Terra Alta” (Tarragona), en el pueblo de Horta de Sant Joan, donde le alcanzan el agotamiento y la enfermedad. Joaquín fallece el 10 de julio de 2007, pensando en Venezuela, al que consideró siempre el mejor país del mundo.
Nuestra política es propender por el desarrollo de los individuos que laboran en nuestra empresa. Por lo tanto, somos conscientes de que la ejecución de las actividades del programa de salud ocupacional que se establezcan, son de carácter permanente y deberán plantear, como filosofía primordial, el desarrollo de las acciones, con equipos interdisciplinarios, orientados hacia la promoción y prevención de la salud de los trabajadores, para protegerlos de los riesgos ocupacionales y ubicarlos en un ambiente de trabajo acorde con sus aptitudes psicofisiológicas.
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